domingo, 13 de enero de 2008

Conato de cambio vol.II

Ahora sí. O empiezo con todo lo que se me amontona encima de la mesa de mi habitación o vuelvo al estado de no retorno. ¿Por qué cada día soy más vaga? yo cuando era pequeña me levantaba los sábados a las 9.30 y recogía la casa, pasaba el cristasol por la mesa de doble cristal del salón y cuando iba a clase entre diario, en la hora de la comida hacía los deberes de la mañana para luego no tener que hacerlos por la tarde y disfrutar de mayor tiempo libre. Ahora mi problema es la falta de planificación. Admiro mucho a toda esa gente que se levanta va a la universidad, llega a casa y hace trabajos, resume apuntes y todo eso. Conozco un caso que comenté a mi amiga Paula y dijo que eso era enfermedad, yo creo que puede ser eso o luchar por lo que quieres en el futuro y por supuesto, mayores posibilidades de conseguirlo tendrás. Es así. Lo que está claro es que el toro me va a pillar en febrero. En junio no puede pasarme así que basta ya de lloros y de ay señor qué perdida estoy y ponerme con lo que me tengo que poner. Hasta el 14 de febrero no salgo. El problema es que los fines de semana los voy a desperdiciar igual y seguiré levantándome a las mismas horas indecentes que llevo haciendo desde las vacaciones Fnac cuando no trabajaba de mañana. Al menos en esos tiempos tenía la excusa de que trabajaba. Se acabaron las excusas. Quiero ser como ella.